Conexiones creativas
La herramienta secreta de las mentes innovadoras

Prólogo

La creatividad ha hecho carrera en el mundo actual. Si antes era un bonito añadido, hoy se ha convertido en algo imprescindible.

Para los docentes modernos, constituye una de las formas más refinadas de aprendizaje. Para los psicólogos, es uno de los medios más importantes de autorrealización. Para los ejecutivos, un pilar fundamental del liderazgo moderno. Verdaderamente, la creatividad ha dejado de ser un lujo para convertirse en una herramienta básica de supervivencia en el siglo XXI. El éxito personal y profesional dependen de ella.

No hubo nunca, por tanto, un momento más adecuado para cultivar la creatividad entre nuestros estudiantes, entre nuestros conciudadanos, entre nuestros empleados y la nuestra propia. Y aunque la creatividad pueda parecer, a veces, algo mágico, lo cierto es que, como señalan las autoras de este volumen, Dorte Nielsen y Sarah Thurber, el pensamiento creativo tiene unos patrones propios, sus propias directrices y mecánicas, y, una vez aprendidas, pueden ayudarnos a pensar y a colaborar mejor y a dar con mejores soluciones.

Nuestro mundo acelerado reclama respuestas creativas y las estrategias y los ejercicios prácticos que recoge este libro estimulan justamente eso: la creatividad bajo demanda. ¿Por qué esperar a que aparezcan las musas? Aprende a responsabilizarte de tu propia creatividad. Nielsen y Thurber ofrecen métodos probados que te enseñan cómo hacerlo. Comprométete a seguirlos y serás capaz de producir ideas rompedoras cuando y donde quieras.

Me llena de alegría que este libro pueda llegar a lectores de todas partes del mundo.

Dr. Gerard J. Puccio
Director del Centro Internacional de Estudios sobre Creatividad de Nueva York (ICSC)

Copyright del texto: sus autores
Copyright de la edición: Editorial Gustavo Gili SL

-

Introducción

Todo empezó en una agencia publicitaria, en Londres. Corrían los primeros años noventa —una edad dorada para la publicidad— y yo estaba en todo el meollo, trabajando como directora de arte en el departamento creativo de una de las agencias publicitarias más grandes del mundo. Las cosas iban bien. Los premios no paraban de llegar y llovían los elogios. Fue entonces cuando recibí una invitación de mi antigua facultad, el Instituto de Artes Gráficas de Dinamarca, para dar una serie de conferencias sobre creatividad y pensamiento creativo.

Mis colegas profesionales se reían de la idea de “impartir” creatividad. “O la tienes o no la tienes”, decían. Algunos de los más cercanos me advirtieron que iba a malgastar el tiempo tratando de enseñar a otras personas a ser creativas, pero el firme deseo de aprender que mostraban mis estudiantes me obligó a intentarlo. Como tantos otros antes que yo, empecé por hacerme la pregunta: “¿Cómo puedes enseñar a la gente a ser más creativa?”.

Me convertí en una observadora sigilosa. En la agencia, estudiaba cómo los creativos profesionales alumbraban sus ideas y sus premiadísimas campañas. En el Instituto, observaba a los estudiantes lidiar consigo mismos para producir trabajos originales. Con el tiempo, advertí la presencia de un patrón muy llamativo. Todo parecía reducirse a una sola cuestión: La gente que es buena teniendo ideas también es buena detectando conexiones.

Pero ¿de verdad podía tratarse de algo tan simple? ¿Enseñar a las personas a establecer conexiones podía ser una forma de ayudarlas a ser más creativas?

La idea no era muy ortodoxa. La mayor parte de las técnicas creativas solían estar enfocadas a los procesos y las herramientas. Percibir conexiones no es más que una cualidad, que además se puede enseñar, y que yo sospechaba que estaba íntimamente ligada al pensamiento creativo. Así que me lancé y diseñé un programa curricular sobre la creatividad basado en un pilar fundamental: la detección de conexiones. Lo que empezó como una corazonada tomó forma en una serie de ejercicios que hoy constituyen la espina dorsal de un currículo para pensadores altamente creativos.

Nuestra escuela es ahora parte de la Escuela de Periodismo y Comunicación Audiovisual de Dinamarca. Cada año, unos 500 aspirantes a directores de arte, redactores publicitarios y pensadores conceptuales solicitan la admisión en nuestro departamento. Aceptamos a 24. Nuestros graduados reciben ofertas de trabajo de las principales agencias de Nueva York, Londres, París, São Paulo o Shanghái.

Si los premios internacionales pueden considerarse un baremo fiable, podemos afirmar que este nuevo enfoque docente sobre la creatividad funciona. A día de hoy, el curso de Comunicación Creativa que creé en 2007 ha ganado más premios del campo de la publicidad que ningún otro programa de grado en el mundo. Nuestros graduados han recibido galardones internacionales por su creatividad en los D&AD, los Leones de Cannes, Epica, CREAM o Eurobest, entre otros. Por supuesto, todo el mérito es suyo, pero creo que todos estarían de acuerdo en que, además de su duro trabajo y su dedicación, el uso de estos métodos docentes novedosos y audaces ha potenciado la creatividad que ya traían de serie.

Con los años, he sentido que había necesidad de un libro sobre creatividad que fuera más allá de la enseñanza del proceso creativo y sus herramientas, y que también ofreciera un enfoque práctico sobre cómo potenciar la habilidad innata para pensar creativamente.

Así que contacté con mi maravillosa amiga y compañera creativa Sarah Thurber, socia directiva de la firma FourSight en Chicago. Sarah también ha dedicado veinte años de su carrera a enseñar y escribir sobre creatividad. Cuando cursábamos juntas el Máster de Ciencias en Creatividad del Centro Internacional de Estudios sobre Creatividad de Nueva York, descubrimos lo poderosa que era la combinación de la experiencia que ambas teníamos en publicidad, redacción, edición y enseñanza creativa. Nuestro objetivo ha sido crear un libro único que combine un enfoque muy práctico y versátil con unos cimientos académicos sólidos.

Concebimos también el presente volumen como una ocasión para desterrar el mito de que el talento creativo es algo que solo posee una minoría privilegiada. Esta es nuestra oportunidad para transmitir el secreto de las personas altamente creativas a un público mucho más amplio y para compartir los conocimientos, las técnicas y el entrenamiento necesarios para potenciar su creatividad innata.

Dorte Nielsen

Copyright del texto: sus autores
Copyright de la edición: Editorial Gustavo Gili SL